Varón de 35 años.
185 cm y 100 kg.
Rotura del primer dedo del pie derecho.
Osteomielitis de ese dedo.
Intervención con injerto que fracasa.
De nuevo intervenido con más éxito y con secuelas:
– hallux limitus
– artrodesis interfalángica
– index minus
Rehabilita con tesón hasta poder revertir la fijación de la metatarso falángica. 📷 1 y 2
Acude a consulta presentando dolor insoportable bajo M1 y falange proximal del mismo radio. Dolor en «el arco» del pie.
No quiere llevar plantillas si puede ser.
Tiene oposiciones con pruebas físicas en unos meses. Incluye carrera a pie.
Determinamos que se trata de un bloqueo del flexor largo del primer dedo que provoca una sesamoideítis. El dedo se preactiva en FD (¿se pasó con la «rehabilitación»?) El primer radio con el dedo corto se sobrecarga en dinámica y la curva LAMFI nos da esa sobrecarga medial. 📷 3 y 4
Proponemos un plan de ejercicios que no nos lleva a un punto satisfactorio con respecto al dolor. Así que, sí: proponemos hacer unas plantillas.
Podiaflex sobre tejido de 1.7 mm
Transflux de 1 mm. Cortado como si de la fascia plantar se tratase. En el derecho un alargo de Morton con refuerzo elástico de Transflux (de esa «fascia» artificial) hasta la falange proximal.
Tranquilos!! El footbed de Conformic de 3 mm esconde desde la diáfisis de M1 hasta el final del dedo una pieza de poron XRD. Bajo M2, 3, 4 y 5 una pieza subcapital de lighten dynamic 300 de 2 mm.
El forro es Evabound.
Hoy ha venido a la consulta de control al mes de la entrega. Le he preguntado «qué tal». Su respuesta:
«Tío, estoy corriendo 4 km sin dolor, esto es un milagro»
No. No es in milagro. Es ciencia.